Desmontar y destruir, así es como funciona.
Todavía tenía por aquí dos discos duros USB defectuosos de WD, listos para tirar. Sin embargo, a pesar de estar defectuosos, no quería tirarlos a la basura. En teoría, alguien podría pescarlos y, con un poco de esfuerzo, leer los datos. Es poco probable, pero para qué arriesgarse. Sobre todo porque el disco duro está técnicamente bien, sólo que ya no responde, ya que he brickeado este disco duro.
La carcasa
La carcasa en sí no tiene tornillos. Ni siquiera debajo de los pies de goma en la parte inferior.
Abra la tapa de la carcasa
Abre con cuidado la parte superior con un cuchillo. La tapa está asegurada con cierres, pero se pueden quitar fácilmente.
Sacar el disco duro de la carcasa
Ahora se puede extraer fácilmente el disco duro.
Los discos duros WD no tienen conexión SATA
Aquí también vemos una gran desventaja de los discos duros WD. Muchos fabricantes instalan discos duros SATA normales, que luego se conectan con un adaptador USB. WD tiene una placa USB directamente en el disco duro. Esto significa que ya no es posible acceder fácilmente a los datos mediante un adaptador si falla el USB.
En mi caso, podría haber devuelto la vida al disco duro instalándolo en un PC. Para mí, esta es definitivamente una razón para evitar los discos duros WD en el futuro. Aunque hay instrucciones de soldadura en Internet para conectar un adaptador, no es una tarea trivial.
Desmontar el disco duro
Abre la tapa del disco duro. Aquí hay numerosos tornillos Torx pequeños.
También aflojamos la placa de circuitos.
Es de suponer que las medidas adoptadas hasta ahora bastarían para garantizar que nadie lee los datos. Alguien tendría que hacer el esfuerzo primero, o a partir de aquí el “atacante” tendría que tomarse el dinero por su mano, pero seguiremos.
Destrucción del disco duro
Ahora ya podemos quitar la tapa y ver el cabezal de lectura/escritura y los soportes de datos.
Ahora aflojamos el motor, también Torx.
Ahora ya puedes extraer los discos de datos individuales. En mi caso, éstos se rompieron enseguida. Ahí se acabó el asunto. La recuperación de datos ya es demasiado tarde. De lo contrario, basta con rayar los discos individualmente o romperlos, haciendo que se rompan en numerosos trozos pequeños. La precaución está a la orden del día y una aspiradora es imprescindible.
En fin, ¡hemos terminado!
